Thursday, December 28, 2006

Del “Espanglish” y otros demonios




A principios de Diciembre del 2006 después de compartir unos inolvidables días con el Orejón Mickey y el resto de sus amigos, agarramos nuestro carro y desde Orlando programamos el GPS para que nos llevara al Lincoln Road 1111 en Miami.

Ibamos rumbo a encontrarnos con una buena amiga de la publicidad y con uno de los mejores amigos de mi vida…”El Rolito”, Cabe decir que Rolando y yo somos como hermanitos y no nos veíamos hace aproximadamente 6 años; estando en Miami la mismísima ciudad del Show de Cristina, pensé que no había mejor lugar para ese reencuetro.

Estando en Miami empezaron a brotar como por arte de magia las “limos”, los ferraris, los Rolls Royce, etc. Y entre ellos una gran cantidad de Gringos queriendo parecer latinos y otra gran cantidad de latinos queriendo parecer gringos. La gran mayoría de ellos inconcientemente hablando la mitad de las frases en español y la otra en Inglés me permito citar un ejemplo: “Mira tú agarras la 30th street, Keep your left hasta la Exit al Downtown, ahí a la derecha y ya llegas”. Muchos Colombianos, Muuuuuchos argentinos, Dominicanos, Puertorriqueños, Cubanos. Creo que Miami es una excelente punto de encuentro con la cultura caribeña y con las nuevas tendencias de diseño , música, arte, fashion…etc.

El glamour en su máxima expresión y en las tiendas uno que otro representante de nuestro jet set criollo (colombiano), calles como Lincoln Road, Ocean Drive y Coral Gables se volvieron de nuestro diario pasear. A decir verdad Miami me pareció una ciudad super bonita, tal vez porque como ellos mismos dicen: es la menos gringa de las ciudades y seguramente porque Magdalena y yo nos encontramos con ese Hermano al que quiero y admiro mucho (gracias Rolito).
Los testimonios gráficos de esta breve reseña están disponibles para ustedes mis honorables lectores en: www.zorpia.com/lakikaonline/albums

Agradecemos de nuevo su visita a este…su blog y si tienen tele, ahí se ven.

Friday, December 22, 2006

break para recordar mi saltada del charco




Pues el amor me hizo tragarme el orgullo y sacar la visa de los EU (bueno después empecé a sacarle el jugo como vieron en las fotos con el orejón). Bueno en esa ocasión la saqué porque por ahí tenia que pasar para ir a Varsovia…sí Varsovia la capital de Polonia, por qué llegar hasta allá?, pues así es esto del amor. En ese entonces Magdalena Krajewska mi novia , ahora esposa, me invitó a conocer a su familia, y yo feliz empaqué maletas. Además del consabido protocolo para entrar a una nueva familia, lo ví como una excelente oportunidad para castigar mi incultura y para llevar los apellidos a otro de esos lugares en los que nunca imaginamos que se iba a escuchar.
En la madrugada del 12 de marzo el despertador sonó por puro protocolo porque en realidad la ansiedad no me había dejado dormir, llegó el taxi y puse en el baúl junto con las maletas la incertidumbre propia que precede un encuentro con lo desconocido. Llegamos a Houston pisé por primera vez Estados Unidos estrené mi visa y no más por esta ocasión y en memoria del orgullo que me tocó tragarme voy a omitir detalles de esa visita. Salimos rumbo a Ámsterdam, y todas esas horas de vuelo tuvieron su merecida recompensa, mis sentidos tuvieron un desaforado encuentro con la multiculturalidad era como ver el travel channel pero pasando por el lado de uno, desde ese momento la experiencia que empezaba a vivir me despertó esas neuronas que se niegan a trabajar porque creen que ya han visto mucho.
Llegamos a Varsovia y como me lo esperaba…el John no entendía naaaaaaaaada, juemadre creo que es lo más cercano al analfabetismo que he vivido. Sólo sonidos y letras juntas que no tenían absolutamente ningún sentido, pero todo bajo control conmigo iba la traductora más hermosa que me hubiera podido regalar la vida. La nieve se presentí ante mi con su inmaculada blancura, la familia política me recibió como si me conociera de años (y como si me entendieran). Viaje a la bella Cracovia y una fuerte experiencia en Auschwitz el tristemente famoso campo de concentración Nazi; muchos monos ojiclaros, cerveza caliente y mis primeras palabras en polaco “ja Mówie troche po polsku”. Los testimonios gráficos de esta experiencia me permití subirlos a un álbum virtual que se encuentra en esta dirección y que a Magdalena y a mi nos encantaría que visitaran: www.zorpia.com/lakikaonline/albums , después de 20 días regresé con muchas cosas en la cabeza, con unas ganas inmensas de compartírselas lo mejor de todo Magdalena y yo ya como esposos.
Bueno ya con esta me despido no sin antes agradecerle su visita a este …su Blog, espero que nos estemos viendo muy seguido por acá y si tienen tele ahí se ven.

Monday, December 18, 2006

un espacio para compartirles




yo sigo acá en esto de la exploración de una forma más efectiva de compartirles las fotos de las cosas que pasan por acá, cómo estoy empezando en esto y los testimonios gráficos son muchos pues es necesario seguirle explorando. En la Agencia el nivel de trabajo bajó, entonces el tiempo para actualizar este su bolg, va a ser bastante.
De por mientras...dénse una vuelta por este album

http://www.zorpia.com/lakikaonline/album/713610/slide_show

ahí subí unas fotos de nuestra visita al Animal Kingdom, que fue básicamente mi primer contacto con el mundo de Disney, por primera vez me abracé con un personaje, por primera vez no quería dejar de ser niño, por primera vez Magdita se subió a una montaña rusa tan heavy como el "everest", por primera vez se me ocurrió empezar a buscar un medio para compartirles todas estas experiencias sin necesidad de llenarles de todas nuestras sonrisas sus cuentas de mail. Si pueden estaríamos felices de leer sus comentarios. un abrazo a todosy si tiene tele...ahí se ven

Wednesday, December 13, 2006



Así las cosas, el Orejón nos abrió sus puertas y nosotros felices entramos con nuestros niños interiores, creo que todavía ando en las calles esperando que me salga algo de algún lado. La experiencia será inolvidable (creo que jamás había tomado tanta coca cola en mi vida).

En la casa del orejon





Y fuimos niños de nuevo


Así fue, una tarde Magdalena y yo decidimos que queriamos darle un regalo a nuestros niños internos y a nuestros adultos externos, sin pensarlo, un par de llamadas, una mordida a los ahorros y con el permiso de Jacek de gastanos sus ahorros en nosotros, decidimos visitar la mismísima tierra del Ratón Miguelito.
Sabiendo que lo único que podía esperar es que no sabía que esperar decidí yo en lo personal tragarme mi orgullo y visitar de nuevo los "yunaits".

De la experiencia muy poco se puede contar por ahora, porque hasta ahora yo mismo estoy tratando de entender todo lo que recibieron las neuronas en esos días. mucha información, mucha diversión , mucha coca cola, mucha comida chatarra, pero sobre todo y para mi fortuna mucha , pero mucha Magdalena.

(se adjuntan testimonios gráficos del acontecimiento)